29.7.10

Interpol: Interpol



Horas laborales, risas ahogadas, evolución infantil… inesperadamente, ante mi asombro, aparece a mis ojos y ya a mis oídos el nuevo disco de Interpol, una banda que me fascina y que ya he escrito sobre ello. Han podido mantenerme a la espera, expectativa e incertidumbre con 2 sencillos que han otorgado antes de su lanzamiento… Por fin, y antes de tiempo, está conmigo.

Ahora con su 4° disco homónimo (así es, no se llama Light como muchos han pensado e incluso atrevido a mencionarlo, ese sólo fue un sencillo); Interpol nos demuestra que aún no se les termina el potencial característico de su post punk que nos han otorgado hasta el día de hoy.

Influencias claras de bandas atemporales, sonidos característicos del líder de la banda y que ocasionalmente (caso de Summer Well) suenan a Julian Plenti en is Skyscraper. Esto último en nada negativo, por el contrario, me fascina que mantengan su línea identitaria con destellos que permitan seguir asombrándonos y desear un poco más…siempre se puede un poco más.

Desde su excelente disco de Turn on tjhe Bright Light (el cual por cierto me fascina escucharlo en acetato), pasando por Antics y Our Love to Admire, Interpol con Interpol ha mantenido la línea y nivel que lo han caracterizado, habría que reconocer y/o puntualizar en que la han mantenido, no creo que lo hayan superado, pero al hacer un buen disco, redondo, se les puede perdonar ello, sobre todo con la identidad que muchos bandas desearían, simplemente ha sabido diferenciarse.

Una primera escucha no es suficiente, pero mis ansias de plasmarlo fueron bastas. Escuchar canciones como Summer Well, Try it On (en la que nos sorprende el piano a lo largo de toda la canción), All of The Ways y por supuesto Lights o Barricade que ya escucharon o escucharán en su radios.

Mi única tristeza es que por ahora no es una versión de gran calidad, pero eso, meses antes del lanzamiento no tiene importancia.

Ahora solo tengo que regresar al trabajo, susurrando la tonada de alguna de las canciones que transformaron mi día y acumulando mi ansia por poner de nuevo play y sangrar otra vez con su música.

28.7.10

Arcade Fire: The Suburbs


Tiempo atrás había escuchado 2 rolas de este disco que se habían filtrado en la red, mis ansias se incrementaron y volví a Funeral y Neon Bible, para mitigarlas un poco. Hace unos días se presenta por fin uno de los discos más esperados para este año.

The Suburbs, el tercer álbum de la banda canadiense Arcade Fire. Después de 3 años, por fin saltan con un disco sumamente increíble. Han dejado un poco de us identidad y se han atrevido a mostrarnos la madurez que han alcanzado y que incluso la misma BBC ha llegado a compararlos con el Ok Computer de Radiohead y no creo que estén muy lejos de ello, aunque me gusten más las analogías.

Por supuesto mantienen la línea que los caracteriza, esa especie de pop barroco que pocos pueden hacer, ocasionalmente encontramos algunos tonos de un pop más clásico, y otras tantas a la música balcánica; 16 canciones en donde 2 comenzaron a darme pauta de las emociones que vienen en camino…

26.7.10

Imagina esto…

En serio, inténtalo… te estoy hablando, no sólo es un título. Sólo cierra los ojos he imagina… mejor dicho, sólo escucha… es intermitente, su caída, el cuerpo que lo envuelve, se junta, se forma y si estás más atenta encontrarás la diferencia… ahora calla, no respires, siente como tu cuerpo intenta sentir lo que quiero decirte, lo que quiero que sientas, no sólo es su sonido, sino el contenido y la forma que se va creando. Pon atención, sabrás de dónde proviene, ahora continúa con tu sensación, hazle caso a tu cuerpo… la puerta en color blanco viene a tu mente, es la misma, sólo que ahora lleva una grieta entre sus venas, la mancha de café sigue intacta, en aroma y potencia, con su inocencia y gritos, giras un poco, abres con la incertidumbre de la sorpresa pero no te detienes, aguantas la respiración, cierras los ojos y tu pie derecho obedece al placer, no a ti, por ello, te otorga el primer paso, la primera sensación sónica que tanto te habías reservado para el grito final, un segundo paso le continua y el crujido de los pasos sigue retumbando en tus oídos, ¿reconoces ese sonido?, mudo y sórdido ante tu andar… ándalos, continua unos cuantos pasos más, sabes que el murmullo se presenta a la izquierda; ten cuidado con la astilla con la que alguna vez te tropezaste, recuerda que tus gritos y lágrimas me tuve que sorber entre risas frívolas que me caracterizan y que te alteran; alzas el pie, me escuchas pero no dejas de sentir, tu curiosidad es tan amplia como el espectro emocional que cargamos; llama tu atención el reflejo de tu rostro que te encuentra en el espejo sobre la cabecera de la cama, el negro que lo enmarca y el olvido que refleja… Te detienes, sabes el camino pero te detienes, no soportas la atmósfera que te embarga y avanzas acelerando tu paso hasta que un libro, no importa el título siempre fue uno diferente, te detiene, el cuerpo se te dobla, desfallece, te acercas lentamente, la rodilla derecha en la duela y el brazo izquierdo intentando tomarlo, ambos tiemblan y se vuelven lentos sin tiempo, uno de tus dedos intenta tocarlo pero la carga de las letras retumban en tus oídos sobresaltándote; sacudes tu cabeza, te llevas las manos al rostro queriendo limpiar el sudor que no existe y volteas buscando lo que sabes no encontrarás, porque aún no termino de escribir…. Todo sigue en su lugar, o al menos así lo parece, a la izquierda se encuentra el closet de los momentos, la ropa que nunca hizo falta; giras lentamente hacia la derecha y una perspectiva del espejo que nos reflejo te escupe sólo tu rostro; frascos, pomos y olores particulares te invaden los pulmones, te levantas con gran esfuerzo y rodeando la cama negra con la funda amarilla te diriges hacia lo que llama tu atención; una lágrima de tu ojo izquierdo resbala por tu mejilla e intentas secarla, aunque no lo logres, los números del frasco y la imagen que te proyectan se mezcla con ella, respiras profundo e intentas contenerte, es un símil de mi aroma. El frasco cae y los trozos que salpican tu dolor te hace reaccionar, la soledad de tu rostro te observa desde el interior del espejo; lo siento… se me olvido sacarlo… te volteas con gran rapidez, observas a uno y otro lado en busca de algo que te haga aferrarte o sentirte parte de este espacio. El brillo de un título te deslumbra, reconoces la imagen, asomaba del bolsillo trasero de mi pantalón junto a una fuente en una ciudad que no nos pertenecía, noctámbulamente algunas de esas letras han perpetrado tus sueños, ahora con gran ímpetu corres hacia ellas, intentas buscarlas, pero la página en blanco te ciega, solo se escucha el sonido del libro al caer, seco, sin sentido, sin palabras y sin letras. Sólo entonces callas, guardas silencio total, dejas de ser y tus pupilas se dilatan, tu respiración se tranquiliza, el miedo lo interiorizas, el grito guarda su intensidad en tu boca y las manos con sus caricias se desperdigan por la sábana, la duela y parte de tu cabellera. Intentas tranquilizarte, pero el continuo de ese sonido que te trajo hasta acá sigue retumbando en tus oídos, ahora lo sientes. Tus ojos se fijan en el hilo de un color intenso que no puedes descifrar, pero que tan poco es tu fin, lo sigues con sigilo, lentamente, con respiración cortada, su camino perfecto baja lentamente, te muestra cada parte que ha sido dañada, te asombra la perfección del hecho, incluso piensas que es parte de una práctica constante, de un sentimiento inalterable, eres tú a la perfección. El sonido urbano rompe el silencio, las persianas azules se vuelven un péndulo y, entrecortadamente, ceden el paso a una luz casi indescifrable, es entonces cuando tu rostro gira y puedes observar y sentir esa emoción que aún nos carcome y que me lleva al final de las letras, tu rostro refleja pánico, desesperación e impotencia, cada recuerdo te ha llevado más de lo debido; el sonido se vuelve más intenso, constante, monótono, comienza a tomar forma, color y cuerpo, el dedo contiene los decibeles y los líquida a su propio ritmo, te sientes húmeda, pero ahora, todo comienza en tu rodilla, la cual pusiste en el suelo nuevamente, solo que ahora es la izquierda, el pantalón que tanto me gusta comienza a cambiar de color, tu rostro se transforma y el grito se ahoga en las lágrimas, el olvido se transforma, te observas en reflejos que no vienen de espejos, las paredes blancas intensifican el dolor y mis letras llegan al final que se ven reflejadas en tus ojos que intensifican el color rojo carmesí,... de la última gota de sangre que cae.

Olvido

93

21.7.10

Of Montreal: False Priest


Sorpresas concatenadas que se presentan en mis horas blandas, no sólo por el número de discos, incluso por escuchar en la radio el nuevo sencillo de Of Montreal, Coquet Coquette de su nuevo álbum False Priest que saldrá a la venta el mes de septiembre.

Por supuesto, ya no es tan extraño encontrarse este tipo de grupos en la radio, marcando nuevas tendencias, a pesar de tener años en el mercado y pasar desapercibidos para muchos tantos y muchos otros. Otra sorpresa es como este fenómeno influye en la creación, distorsión, composición de las bandas, unas para bien y otras para generar volumen…en fin…

El punto es, que False Priest mantiene ahora en su 10° disco la gran capacidad e imaginación que los han caracterizado en mucho tiempo y que se demuestra a lo largo del disco, inclusive en canciones más allá del sencillo que algunos ya habrán escuchado, pero que no es la representación fiel del álbum mismo.

La voz característica de Kevin Barnes, sus juegos vocales y coros en falsetes genera un impacto motriz durante todo el disco. Notas experimentales rodeadas de un dejo de funky. En False Priest se escuchan en menor grado secuenciadores y sí más instrumentos de cuerdas, pianos y baterías tocadas en vivo. Un gran disco en el que se presentan desniveles de sensaciones de una a otra canción.

Si les gustó Coquet Coquette seguro encontraran gratas sorpresas en False Priest.

19.7.10

Beach House. Zebra EP


Después de habernos proporcionado uno de los mejores discos que va del año como es el Tenn Dream. Beach House nos complace con un excelente EP que lleva por nombre Zebra, sólo 4 canciones, 17:30 minutos y demasiadas sensaciones extraordinarias.

De inicio, abren telón con “zebra”, el cual fue el sencillo de Tenn Dream, pero con unos toques renovados que exaltan más el sentimentalismo de la canción. Enseguida encontramos con 2 canciones nuevas las cuales proyectan claramente el estilo característico de este dúo americano y que bien pudieron estar en el anterior disco. Soniditos que aparecen de una caja musical de juguete. Y por último, cierran con un remix de “10 Mile Stereo”.

Quizá la reserva de estas canciones se deba a la sorpresa que desean otorgarme, cuenta gotas sónicas que se desparraman y rebotan en los más recónditos recovecos de este espacio.

15.7.10

Tired pony: The Place We Ran From


La felicidad me embargo y quizá se deba a que la rechazo constantemente, lo mismo que la locura, pero ese es otro tema de otro disco. Dicha felicidad viene rezagada desde junio del año pasado en que Tired Pony lanzó su primer sencillo llamado “Dead American writers” y un año después, por fin, aparece su disco The Place We Ran From.

Primero hablemos quién es Tired pony. Varios quizá los reconozcan por separado, pero hablamos de Gary Lightbody (Snow Patrol), Richard Colburn (Belle & Sebastian), Iain Archer, Jacknife Lee, Peter Buck (REM), Scott McCaughey y Troy Stewart, así o falta alguien… Está bien, vamos a aunarle la participación de M.Ward (altamente reseñado por un servidor), Tom Smith (vocalista de los grandes Editors) y….. mi chica favorita Zooey Deschannel.

Sin más...The Place We Ran From es un disco que empieza tranquilo, pero que termina en una tormenta de sonidos y emociones que catapultan un sin sentido orgánico.

Mis favoritas, por supuesto, “Get on the road” en donde la voz de la pequeña Zooey acompaña de maravilla, creando entonces una maravillosa mezcla de tonos y “The Good Book” con la voz altamente reconocible de Tom; es una lastima que llegue a nuestras tierras hasta septiembre (aunque en este mes pueden pedirlo a tierras inglesas), ojalá la espera les sea soportable…

Au Revoir Simone: Night Light

Seguro conocen a este trío de chicas que conforman Au Revoir Simone, si no es por su música al menos por su belleza, sencillez y vestidos veraniegos. Por supuesto, ninguna de las dos está por encima de la otra (mmm…), pero estas chicas talentosas que dan existencia a su música a partir de sintetizadores y sus bellas voces que otorgan un estilo que David Lynch definió como “inocentes, hip y nuevo” o ellas mismas como “música electrónica caliente y orgánica, con cantantes femeninas” nos presentan para este año Night, Light.

Un disco de remixes que van desde Jensen Sportag, Neon Indian (ya en carpeta), Montag (Trace a Line, una de mis favoritas), la fabulosa Deradoorian vocalista también de Dirty Projectors (Only You Can Make You Happy), Silver Columns (We Are Here), Aeroplanes (Another Likely Story, fabulosa), Tanlines (Shadows) y varias más… en los que la constante se mantiene en los sintetizadores sin importar el género. Lo rescatable de este disco es el valor de estas nenas de arriesgarse y ser más atrevidas alejándose un poco del dream, synth, electro o lo que quieran seguido de la etiqueta de pop que las caracterizaba.

Creo que en Night Light se vuelven más experimentales, que surge cierta euforia o descaro en su forma de entender la música, de cierta forma pierden la candidez, pues ya no las imagino en el campo con vestidos e inocencia dermatológica, sino en una fiesta, mallas de colores, descalzas, con minifaldas y bailando sin parar con una copa en la mano. Después de todo, no pueden negar cierta soses en ellas, (lo cual les perdono) pero me gustan más ahora.

Creo que empieza una cosecha de grandes discos y este es otro de ellos… o el cúmulo de letras y sonidos me desbordan…

The Coral: Butterfly House


Después de darle varias vueltas, escucharlo aleatoriamente y reproducir mis favoritas puedo sentarme a escribir sobre The Coral. Ahora bien, mi entusiasmo por su nuevo disco me ha provocado la emoción de encontrar letras que haya escrito sobre esta banda, pero para sorpresa mía, no he plasmado nada escrito sobre ella en 14 años que llevan de existencia, increíble¡¡. Sin embargo, sé que he hablado de ellos constantemente y que, de alguna forma, estarán plasmadas en alguien que no sé olvide tan fácil.

The Coral es una de esas bandas que, para mala fortuna de ellos, tuvieron que haber nacido antes o después de haberlo hecho. Provenientes de Hoylake, cerca de Liverpool, han pasado una serie de dificultades para obtener la fama que realmente se merecen, sobre todo porque han sido marginados, ninguneados y prestados a poca atención a nivel mundial (caso contrario en islas Británicas donde el reconocimiento es bastante alto).

Pocos son los que han reconocida lo maravilloso de esta banda, la cual atmosfériza sus discos con melodías amables, felices, guitarras precisas, ritmos beat y brit, aderezadas de un ligero toque de psicodelia sesentera (The Beatles) e influencias modernas de rock (The Last Shadow Puppets). Su mayor reconocimiento fue en el 2002 con su álbum debut homónimo que llego al 4° mejor álbum del año.

Después de esas fechas mantuvieron un bajo perfil, no por calidad o nula creatividad, sino por el hecho de las tendencias, modas y géneros que en estos años han marcado tendencia. Este fenómeno puede resultar, actualmente, positivo para ellos, en donde los sonidos sesenteros van cobrando auge a últimas fechas.

Para este mes, The Coral lanza un disco doble llamado Butterfly House (sencillo que también lleva el mismo nombre y que escucharán en sus radios) con 18 grandes canciones que distan mucho de tornarse largo o aburrido, por el contrario, nos demuestran una serie de canciones ideales para un día como estos.

Canciones ideales para correr y saltar en la pradera bajo algunos rayos de sol cálidos en pleno verano, por supuesto, si es que tuviéramos pradera, sin embargo, las calles encharcadas de la ciudad, el smog, obras e indiferencias social tendrán otra perspectiva, el fin último es ridiculizarnos con gran placer.

Canciones como Roving Jewel con guitarras aceleradas y una voz neostalgica; Walking In the Winter con un estilo más folk que cantaré mientras camino o Green is the color” en donde se proyecta claramente la influencia de The Beatles y The Last Shadow Puppets o su lado más rockero en She's Comin' Around.

Butterfly House será un disco que escucharán constantemente en su radio, porque quizá este sea su año...o al menos parte del mío.

14.7.10

Capitulo Cero: La Huída

Yo ya no soy yo, o al menos ya no soy más yo, el reflejo de mi sombra ausente me hace pensar sobre mi identidad, y aún más, me ha dejado completamente solo.

No reconozco al que camina conmigo, el reloj que me da la hora, ni los tenis azules que voy siguiendo. Me detengo en medio de la calle y ojos furiosos me reclaman con muecas y sonidos que rebotan en el interior de su auto, ambos estamos paralizados. Furiosos y llenos de miedos, me disculpo con el cuerpo y la mirada y ella sonríe incrédula ante la simpleza de mi andanza.

Una vez más, me embarga esa quietud del sórdido ruido urbano que se refleja en ese pequeño continente de agua que logro saltar cuando me veo girar la esquina y me devuelve ese tono azuloso que no alcanzo. Algunas sombras intentan venirse conmigo, algunas caen, otras se golpean y otras se atropellan por coserse a mis pies. Las observo con detenimiento, intento fijar la vista en los puntos en que siento una sombra tendría ojos; quieto, respirando cortadamente, tensando los músculos voy entendiendo su angustia y desesperación ante la orfandad en la que se encuentran, me descubren y su oscuridad parece extenderse a la poca distancia que nos separaba, el aire se comprime dentro de mí, las sombras dejaron de serlo y yo inhalo colores a mis pulmones.

A últimos días siento como el aire entra de forma apresurada a mis pulmones, como si estuviera huyendo de algo y buscara refugio en mi interior. Su miedo es tal, que se adhiere con todas las partículas que la física cuántica le permite, lo que provoca una contracción en ellos y además, todo al unísono tiempo, una pelea constante entre, por una parte, la desesperación pulmonar por expulsarlo y, por otra, la actitud férrea del aire al no querer ser expulsado a este espacio que hoy no reconozco.

Le doy asilo, un hueco. Me la pienso bien y le ruego que hurgue el sitio en mí que mayor seguridad le ofrezca sin hacerme responsable. Las responsabilidades dejémoslas a los hombres que hablan de colores. Una vez instalado, la fuga se hace más fácil, pero no menos incomoda. Echo a correr y sé que sigue ahí, sólo que ahora ambos sentimos, a su modo y a su forma, que ni él, ni yo, vamos con nosotros.

Olvido

93

12.7.10

Ausencia de letras

Existe una serie de ausencia o ¿talento? en un sin fin de discos que no suelen colocarse en la circunferencia de mi tornamesa, las canciones rescatables no suelen cerrar el círculo o, mejor dicho, continuar con la espiral que vamos generando en su entorno.
El fin último de este espacio es volverse, o al menos intentarlo, más selectivo. En toda la música diversa que me va sorprendiendo y encontrando entre varios tantos de discos que voy escuchando cada día. El problema radica cuando se trata de proyectar momentos espontáneos y/o únicos en los que uno se encuentra y que cada canción forma parte de ello, sin embargo, tampoco se ha intentado mantener o desestructurar ese sentido ecléctico que nos caracteriza.
Narro a alguien, me quedo con mucho y desconozco el sentido de mi intento; aún así, la ausencia de letras en este espacio no se debe a la falta de discos en la red, pero a pesar mío, si a la calidad, diversidad y potencia en ellos para ojos tan selectos como los vuestros...
Olvido
93

The Rumours: The From The Corner Into Your Ear


The Rumours es un grupo de indie-rock de Dinslaken, Alemania. Una banda formada desde del 2006, que no despegaba hasta el año 09 cuando el gobierno de Alemania le dio un gran empujón con fondos del mismísimo gobierno a través de la corporación Initiative Music.

Sorprendente lo que puede y hace una potencia mundial, sobre todo al proyectar bandas como The Rumours. En The from The Corner Into your Ear escucho claramente a unos The Strokes (en su excelso Room on Fire) y a Interpool (en Antic´s), a una sencilla, compleja, clásica y bien estructurada banda de rock de las que tanto me gustan en donde se siente claramente la guitarra, bajo y batería aunados a una voz grave que me permiten proyectar un sin fin de imágenes en cada canción, jugar simplemente con los recuerdos, cortarlos y crear un collage atemporal en algún punto de Tijuana.

Supongo, y sólo porque no lo sé de cierto, que será uno de los grupos a escuchar este año junto con Dhelpic, Two Door Cinema, White Lies y, por supuesto, los nuevos discos de Interpool y The Strokes que saldrán este año.

Me fascina jugar con “Like A Cat On A Hot Tin Roof”, “All Is Nothing”, “Get Together”, “I Guess I Know” en donde la voz de Julian Casablancas es altamente similar.

The Rumours si bien no esconde su influencia, me agrada el giro más lúdico, divertido y relajado con el que no exploto y destruyo mi habitación, eso ya es de agradecerse…

6.7.10

Tránsito...

Se dice que siempre me estoy yendo y que no voy a ningún lugar…

Hay veces que bien, hay veces que mal, hay veces que ríes con bocas ajenas y veces que lloras con lágrimas prestadas. Veces en las que te pones botas y otras en las que van más tus pies desnudos. Momentos que merecen vino o whisky y días en los que te deseo en cerveza. Mañanas en las que hueles a bulgary, y otras sin embargo, en las que te perfumas contigo misma... Palabras que merecen réplica y otras con las que tu mejor silencio es tu mejor respuesta. Ocasiones de noches de amor apasionada, con besos apasionados y besos cotidianos, cargados de sin pasión y que hablan más de uno mismo que aquellos enmarcados en pasiones furtivas. Quiero hacer de los contrastes una lógica, quiero que cada momento tenga un por qué, pero no dejar de quererte con tanta interrogante. Van a llegar las noches de copas, en las que la risa es el centro de las reuniones y cada día te levantas recordando anécdotas, es genial. Aquí están ya los días de playa, los días de ciudad, de parque y gusanos, de banquetas y bares, de fuentes y libros en el bolsillo trasero, en los que jugamos a no ser nosotros y matamos cucarachas.

Y ahora… parto..

Olvido

93